lunes, 30 de abril de 2012

OUR SINGLE DAY (Single y Corazón en Siroco, Conciertos Pequeños 2011)




TERESA E IBON, 
ÚNICOS E INSUSTITUIBLES

El sábado 5 de noviembre de 2011 acudimos a mi sala favorita, Siroco, a la presentación en directo de sendos singles -aunque cantaron más canciones, claro- de los grupos Single -Noi pomodori- y Corazón -Me quiero casar contigo, versión del célebre tema de Roberto Carlos-. 
La entrada en escena de Teresa Iturrioz nos impresionó tanto que para recordar algo medianamente parecido tuvimos que remontarnos al alunizaje de Grace Jones en Sónar 2009. No hay nadie que se le parezca: se mueve con la soltura de grandes de la canción como Patty Pravo o Alma María de los Tres Sudamericanos, y esa clase hoy inusual de garbo lo adereza con el descaro posmoderno de una Cristina Lliso de Esclarecidos y con recursos escénicos a lo familia Gutiérrez Caba. ¡Y es guapísima!




Single tienen ya dos elepés -uno de ellos doble- y un buen puñado de singles, haciendo honor a su nombre. En esta ocasión han hecho un homenaje a una rareza discográfica de 1981, en la que Gregorio Paniagua musicó poemas de Lucía Bosè, contenidos en el libro Poemas de Somosaguas. A esa serie pertenece la canción Dime quién eres, desconocido vecino, que reproducimos abajo, o Pensamiento: “Once letras y nombre de flor, empieza por la ‘p’ y acaba en ‘o’ en concatenación, monólogo interior”. Todo el repertorio de Single es audaz y muy conseguido, que no sólo en gesto queda la cosa: para eso Ibon Errazkin es uno de los talentos indiscutibles de nuestro pop reciente: de su currículo podemos señalar, por ejemplo, la aventura del grupo Le Mans, la producción del maravilloso Impermeable de Carlos Berlanga, colaboraciones -también Teresa- en el que quizá sea el mejor disco de Fangoria -Naturaleza muerta- o la banda sonora de la película Gente pez.


DIME QUIÉN ERES, DESCONOCIDO VECINO / SINGLE 
(Dirigido por Miguel Gutiérrez en 2011; art direction Carlos Díez Díez)


(Unas semanas después del memorable concierto, mi novio se encontró con el dúo en la cafetería de la Casa Encendida, y anduvieron charlando un rato: como él me dio cuenta de la simpatía de ambos -dijeron que no estaban acostumbrados a que les reconocieran ni a ser saludados por fans- y de que además aseguraron que le reconocerían para el próximo concierto, ya os aviso, Ibon y Teresa, si acaso leyeráis esto, que no os vais a librar de nosotros...) 


Single recoge lo mejor del pasado musical para en el presente mirar al futuro. El dúo donostiarra es garantía de gozo musical, de innovación y de divertimento. Y en directo son mejor aún que en disco... ¡yo quiero ser su groupie! (Por cierto, enhorabuena a la casa Elefant por su selección de artistas y por esta fiesta que organizaron en Siroco: los DJs, espectaculares, como sólo pueden encontrarse en esta sala que tan a menudo ha servido de encuentro de las flores de pasión de Radio 3).

DÓNDE ESTÁS CORAZÓN, NO OIGO TU PALPITAR

NUEVO FUTURO / CORAZÓN 
 (Un vídeo de 2009 dirigido por Nadia Mata Portillo & Federico Strate Pezdirc)

Ya hemos celebrado otras veces la irrupción de Corazón en el panorama musical, y reseñamos la crónica de su concierto en el Teatro Lara, teloneando a Algora. Corazón Korador suena bien. Aparte de versionar a clásicos imperecederos como Mocedades, Las Grecas, Roberto Carlos o Nuestro Pequeño Mundo, Corazón trabaja un repertorio propio en el que sobresale esa preciosa canción que tenéis arriba, Nuevo Futuro, elegida en su momento por los lectores de Rock de Luxe como una de las mejores del año. Una preciosidad, y con una producción ad hoc -de Ibon Errazkin precisamente-, que le hace parecer la canción que nunca se publicó de Los Brincos o Los Ángeles.
Por cierto, que ambos dúos -Single y Corazón- sugirieron la posibilidad de unir fuerzas en el futuro...
Seguiremos auscultando el pulso de Corazón.

jueves, 26 de abril de 2012

DELICIAS `MAD MEN´



A pesar de que mis seres más allegados ya han degustado con fruición las cuatro primeras temporadas de Mad Men -y esperan con impaciencia el advenimiento de la quinta- yo me hallo aún inmerso en los deleites medio-finales de la primera. Sí, ya sé que es imperdonable; pero a mí me gusta, en los placeres, ir despacio.

De esos capítulos iniciales os recuerdo dos momentos -inolvidables- cualquiera.


Don Draper se venga sibilinamente de las insinuaciones de su jefe Sterling hacia su esposa. Amaña la situación para que suba totalmente pedo los veintitrés pisos que llevan hasta la oficina... así pone de manifiesto la supremacía del macho joven sobre el ajado.

(Pincha en el título para ver el vídeo)


Es el descubrimiento de nuestra heroína Peggy como creativa. Sus ingeniosos comentarios sobre cestas de besos y deseos de singularidad llaman la atención en lo que era un simple muestreo en torno a unos lápices de labios. ¡La escena de las chicas usando el lipstick y siendo observadas sin saberlo es antológica!

(Pincha en el título para ver el vídeo)








MAD MEN

UNA SERIE... OBLIGATORIA




sábado, 21 de abril de 2012

`LOS 12 TRABAJOS DE HÉRCULES´, UNA OBRA MAESTRA DEL CÓMIC ESPAÑOL

Dotado de una fuerza que, en su honor, se definiría con el paso de los años como `hercúlea´, Hércules, nacido Herakles, es el más popular de los héroes de la mitología clásica. (...) Font y Cothias lo presentaron en `Alise´ y Calatayud en este soberbio Hércules pop que hoy se reedita.
Luis Gasca

(...) Miguel se dedica a jugar con sus elementos plásticos, que no son otra cosa que puro lenguaje, para devolverlos transformados después de su viaje a lo contemporáneo. Y lo contemporáneo, en 1972, es el Pop, tal vez por su fresca irreverencia el más adecuado de los idiomas para hablar sobre figuras e imágenes de tan alto poder evocador. (...) Calatayud construye su personal visión del peplum desde un medio de masas como es Trinca, que tiene bien poco de elitista. Más allá de los rasgos más destacables en esta historieta ya clásica (...) se adivinan ecos que llegan desde otros ámbitos: (...) claves a descubrir de un relato múltiple y abierto, rico y pródigo en lecturas como sólo pueden serlo las obras maestras.
Pedro Porcel

¿Por qué escoge Calatayud los doce trabajos de Hércules como base argumental? Hace dos años que ha publicado Peter Petrake (1970), una irrupción absolutamente innovadora en el mundo del cómic. Con ella ha demostrado que el medio puede ser artístico, al menos permeable a las corrientes artísticas del momento. Peter Petrake no sólo se encuentra conectado con el pop art, sino, de manera evidente, influido por el trabajo de George Dunning en Yellow submarine, la película de animación protagonizada por los Beatles. Los doce trabajos de Hércules supone un intento de trascender este estilo, de darle una dimensión más profunda, entroncándolo con tradiciones de larga trayectoria. Conserva la tonalidad pop pero a través de ella respiran las formas características de la cerámica griega o la plástica, elegante y siempre moderna, de la cultura micénica (...)
Pero, además de trazo y color, hay arquitectura. Y se encuentra en la estudiada construcción de las páginas, un vigoroso armazón de viñetas que no sólo genera equilibrios y correspondencias tabulares sino que facilita una lectura fluida, repleta de ritmo. (...) Por todo ello, por su belleza y por su funcionalidad narrativa, puede concluirse que hay más de doce trabajos en este álbum. Al menos uno más. Y ese decimotercero trabajo, desfío no tanto de Euristeo como del prejuicio y la ignorancia, consiste en demostrar el valor artístico del cómic.
Antonio Altarriba

Si tuviera que elegir uno solo de los trabajos que vieron la luz en la revista Trinca, atendiendo a la premisa de su tensión con respecto a la cultura dominante, me quedaría, sin el menor género de dudas, con Los doce trabajos de Hércules de Miguel Calatayud, que ahora felizmente se reedita, aunque los que no conocieron de primera mano aquel contexto difícilmente van a poder calibrar la verdadera dimensión de esas páginas.
Tras el tanteo de Peter Petrake, del que podemos seguir celebrando su experimentación y su sensualidad gozosa, el relato de las pruebas del héroe griego venía a demostrar la falacia de esa disyuntiva entre tradición y modernidad artísticas para modelar una imagen del presente e imaginar un orden estético bien diferente de las cosas. (...) el portentoso Calatayud nos regalaba una de las experiencias sensoriales más originales y valiosas de la historia de la historieta española.

A menudo vuelvo, pues, sobre este libro, (...) y siempre hago nuevos hallazgos en el equilibrio de su composición, o en la matemática de su estructura, o en la sistemática de sus formas puras, buscando de paso esa suerte de estremecimiento que sentí hace casi cuarenta años, cuando lo leí por primera vez, y que una y otra vez renuevo ante esta lección magistral.
Felipe Hernández Cava

La historieta que tiene en sus manos es atemporal. Un producto de disfrute intelectual a diversos niveles. Una obra que no ha perdido un ápice de vigencia desde su aparición hace ya cerca de cuarenta años. Una historieta que se mantiene con una frescura sorprendente, es actual, y tengan presente que así seguirá.
Pedro F. Navarro


Lo fácil sería ceñirse a la nostalgia, pero es que no cabe hacerlo una vez se vuelven a contemplar estas páginas, no hay nostalgia posible cuando se vuelven a leer. Porque uno entonces descubre que sí, que está en ellas todo ese sabor de hace cuarenta años, el cartelismo de la época, esa estética tan característica, los colores maravillosos, las composiciones sorprendentes en cada viñeta... pero es que su lectura seduce por moderna, por contemporánea. Se puede leer este libro como si Miguel Calatayud lo hubiera inventado ayer mismo.
Francisco Naranjo


Es norma generalizada que, de los elementos que componen el lenguaje de la historieta, el color pase a ser un ingrediente descriptivo, matizador, potenciador, como lo musical en el cinematógrafo, de lo dramático. Cuando no mero colorear estético.
Cuando esto no sucede y ese color pasa a ser elemento narrativo, contador e informante de primer orden, posiblemente estamos hablando de Miguel Calatayud.
Micharmut



La aparición de Peter Petrake en Trinca supuso la mayor renovación de la historieta española en tres décadas, con una propuesta que rescribía los tópicos de Roberto Alcázar y Pedrín en unos términos de modernidad tan revulsiva y radical como incomprendida por unos lectores que no sabían asimilar esa brillante mezcolanza promiscua entre Edelmann, Peter Max y Pellaert. Pero Calatayud no se amilanó y fue capaz de reconstruirse en su siguiente obra, Los doce trabajos de Hércules. (...)
Un andamiaje sobre el que ir destilando su renovadora propuesta gráfica, en la que la psicodelia cromática es transformada en un innovador recurso narrativo: la festiva propuesta multicolor heredada de Peter Max se convierte en paletas de tonalidades dominantes que delimitarán cada trabajo del héroe. Naranjas para el León de Nemea, azules y verdes para la Hidra de Lerna, verdes y ocres para el Jabalí deErimantea, marrones y terrosos para las Yeguas de Diómedes... dejando las policromías para sus enfrentamientos con otros seres míticos como Hipólita. (...)
Una síntesis de clasicismo y modernidad que inspiró por igual a toda una generación de ilustradores (...), convirtiéndose en catalizador de una renovación formal tan sorprendente como atrevida para el primer lustro de los 70, que más allá de las lecturas literales en lo artístico, traía un fresco simbolismo de la necesidad de renovación en lo político, de la desesperada búsqueda de la libertad que vivía el país.

Una pirueta imposible que ni siquiera Hércules hubiera podido completar.
Álvaro Pons

Me siento feliz por tener hoy entre mis manos la historieta completa que me turbó siendo niño, obra del genial -¡ahora podemos decirlo!- Miguel Calatayud. 
Feliz por el reconocimiento que supone esta edición, por el gusto de quedar nuevamente deslumbrado y regodearme en ello, y muy ilusionado de poder compartirlo con vosotros.


Los 12 trabajos de Hércules, de Miguel Calatayud, publicados originalmente en 1972 en la revista Trinca, se han reeditado -hace dos años, pero yo lo he descubierto ahora- en Edicions de Ponent, una editorial alicantina.


Más Calatayud y Trinca en Korador:


Soy trinquero

Peter Petrake, mi ídolo pop




jueves, 19 de abril de 2012

SOLDADO Y BIEN SOLDADO


ROBERTO SOLDADO, delantero del Valencia. 26 años, 1,80 m.



Tiene aspecto de replicante este Soldado portentoso que hoy me ha hecho sufrir cuando le he visto revolcarse de dolor en el partido contra el Atletic. Roberto ya me llamó la atención en su época del Getafe -gracias a Medecrece, en cuyo selecto y nutrido archivo he encontrado las imágenes para este post-. Ahora que milita en el club de su Valencia natal se le ve confiado y al mismo tiempo como ausente o sigiloso, cual gacela parda que se apresta al ataque... listo ya para que le levantaran efigie en cualquier calle mediterránea, épico heredero de espléndidas gestas, aguerrido y glorioso este Soldado bien soldado.

lunes, 16 de abril de 2012

THE ELEPHANT MAN

En mi ignorancia ni siquiera sabía que hoy en día se cazaran elefantes. Sólo los he visto en los zoos, y me han producido un sentimiento de ternura y de desgarro tal que tendría que nacer de nuevo para atisbar algún motivo por el que alguien pudiera querer cargarse a un ser de esa especie por deporte. ¡Pero si nos ponen en comunicación con nuestro pasado más remoto! Con sus andares, su parsimonia plúmbea, con el mirar de sus ojos escalofriantes que nos succiona hasta remontarnos a un punto ignoto de la conciencia.

(Recuerdo ahora a Javier Marías cuando habla del horror narrativo, el que acomete a personas célebres cuando comprueban que su brillante currículo queda reducido a una anécdota aparatosa que borra todo lo demás.)

Quisiera haber escrito una entrada en clave irónica, pero no me ha salido. Quizá porque está lloviendo sobre mojado, en la semana en que el niño Froilán se dispara con una escopeta al pie y su abuela dice que "estas cosas pasan con los niños". Claro que qué vamos a esperar que diga quien se despachó a gusto sobre las uniones y cabalgatas gays en lo que fue un auténtico desafío institucional: admito que Ana Botella o quien sea emita su opinión sobre todo tipo de asuntos sociales, porque representa a un sector determinado que tiene el derecho y el deber de expresarla.
Pero esta señora, no: resulta que tantas madres y mujeres de su edad han hecho el esfuerzo de adaptar su mentalidad a los nuevos tiempos, por amor a sus hijos, por evolución personal, y tiene que venir ella a decir esas cosas tan rancias, sobre todo en boca de alguien que tantas posibilidades ha tenido de conocer y de comprender.
Desde entonces creo que se rompió algo -dijeron las malas lenguas si no lo habría hecho a propósito por el odio que supuestamente profesa a su marido-, se comenzaron a bajar escalones hasta llegar a las supuestas mangancias del yerno, de las que probablemente no conoceremos nunca ni la mitad, y cuyo daño jamás será reparado. Eso sí, a su mujer le faltó tiempo para quejarse de que los periodistas no les dejaban llevar una vida normal. Esa vida de normalidad en la que quienes todo tienen se enfangan para alcanzar todavía más, los abuelos se van a cazar elefantes a Botswana y los nietos se disparan escopetas en el pie.

((La viñeta de apertura es del gran Eneko para 20 Minutos)).

domingo, 15 de abril de 2012

ELECTRÓNICA RUSA EN LA CASA ENCENDIDA (Conciertos pequeños 2011)



Uno de los rituales de mis primaveras viene siendo la asistencia al Festival Electrónica en Abril de la Casa Encendida, que se celebra este fin de semana. Este año no he podido ir, así es que me consolaré haciendo la reseña de otro evento electrónico que tuvo lugar en la misma Casa Encendida en noviembre del año pasado: la panorámica de Música Electrónica Rusa, ¡que fue una gozada! Bueno, nosotros acudimos el último día, a las sesiones de Ariu Kara y Andrei Oid, que trataré -no es empresa fácil- de explicar someramente. ¡Ah! Sentaditos y en auditorio, muy en plan Sónar Día.


ANDREI OID, OLEADAS DE PLACER

 POMPEYA 90 (REMIX) / ANDREI OID

Con el fondo de una proyección audiovisual de unos 5 minutos de duración que se repetía continuamente -elementos de la naturaleza mezclados con retazos de soledades urbanas-, este músico de San Petersburgo comenzó a sazonar con distintos condimentos las imágenes, primero acompañado de una chica con la que hacía muy buena pareja, luego en solitario; quizá para que comprobásemos que todo depende del cristal con que se mire, o que el vestido musical determina la atmósfera y el sentido último de lo que contemplamos. Todos los estadios del ánimo desfilaron hasta desembocar en un trance final que, en oleadas, nos inundó de orgasmo. Andrei OID no puede parar quieto durante su performance, como un colegial hiperactivo que, sin embargo, puede presumir de haberse tuteado con Brian Eno y de tener una influencia notable en la escena electrónica de su país, solo o con su proyecto Alexandroid. Para adeptos al minimal y al IDM, la música de baile inteligente.


ANDREI OID EN VIVO EN TVER (Abril 2011, vídeo de sandercast)


ARIU KARA, VALQUIRIA DE NUEVO CUÑO


Ariu Kara (Anastasia Krutova) es una joven rusa que, además de a la electrónica, se dedica a la fotografía profesional y a la realización de documentales. Cultiva una absorbente afición hacia los paisajes post-industriales en ruinas, vertederos, solares de siniestra geografía, espacios despojados de identidad que ella retrata aceradamente, sin compasión alguna, para luego exponerlos a destajo, al por mayor. Como una diosa de la desolación, compone músicas electrónicas al compás de los hermenéuticos cortometrajes que realiza para la ocasión. Y en esas frías liturgias que oficia, la pelirroja valquiria te hiela la sangre.


 
ARIU KARA / PROYECTO ARIULAB 2011, MADRID EDIT

viernes, 13 de abril de 2012

MEMORABILIA TÉTRICA


La memoria selectiva ha querido que de mis recuerdos iconográficos de infancia -no digo cinematográficos porque nunca vi la película- no se haya eliminado el cartel de una bizarra spanish-movie de 1973, Aborto criminal. El impacto que esas imágenes tuvieron en mi mente de entonces -y en la de mis compañeros del cole- fue tremebundo: ¿sabía yo entonces lo que era un aborto? No lo creo. Me ha divertido ahora descubrir que se trataba de una cinta de Iquino -ya por entonces admiraba mucho a Emma Cohen, de la que conocí una fotografía con una camisa totalmente abierta; y tiempo después me enamoré de Simón Andreu -no fui el único, ¿eh?- con intensidad de adolescente virginal y salido: en la película hacía de El guapo, a secas, según he leído en la ficha técnica-. Por cierto, ¡la música era de Bach!