lunes, 25 de junio de 2007

ORGULLO OFICIAL, ORGULLO ALTERNATIVO: MI PREGÓN PARTICULAR


Terenci Moix decía que la patria de un homosexual no es otra que su homosexualidad. Si le apretaban más reconocía, como mucho, que se sentía mediterráneo en el sentido histórico, y al decir eso seguro que su imaginación volaba recorriendo los semblantes y los cuerpos de todos los efebos griegos, egipcios, turcos o italianos que en el mundo han sido, porque con esa frase tan rotunda nuestro añorado escritor pretendía -aparte de dar por saco a los nacionalismos catalán y español que detestaba- señalar dos cosas: que no se puede asumir una patria que excluye y pisotea y que incluso cimenta sus valores sobre el desprecio y escarnio absoluto para el maricón y la bollera -para ellas se reservaba algo peor aún, la negación-, y que la célebre promiscuidad gay que él se jactaba de practicar conlleva, al menos por unos instantes, la asunción completa del amante o del amado, su vida entera y cómo no su nacionalidad: por eso Terenci, que era muy emocional, se sentía siciliano si acababa de follar -perdón por la expresión, que este blog es muy fino- en esa tierra, o de Alejandría si su pasión era allí colmada -que lo debió ser a menudo, ya que es donde una comitiva integrada entre otros por Maruja Torres y Nuria Espert fue a esparcir sus cenizas-.
Esa máxima terenciana que, según su punto de vista -que yo comparto-, ha tenido vigencia durante siglos se desdibuja ya ahora, por lo menos en los países de nuestro entorno. Al tener acceso a la plena ciudadanía, a la igualdad de derechos y de deberes, al contar ya con numerosos referentes positivos que van haciendo que sea posible -aunque quede, claro, mucho por hacer- una vida en normalidad para lesbianas, gays, transexuales y bisexuales, la situación va siendo radicalmente nueva y diferente. Qué podemos decir de España, donde ha habido un cambio revolucionario que se ha ido gestando desde la transición y que nos ha llevado a contar con la legislación lgtb más avanzada del mundo.

Cuento todo esto porque circulan estos días manifiestos varios de grupos gailésbicos y opiniones de colectivos izquierdistas enfrentados al Orgullo oficial, que critican encarnizadamente su espíritu y proponen otras maneras alternativas de celebración -y esto refleja de alguna manera esa controversia entre lo que podríamos llamar posiciones apocalípticas e integradas-. Pienso que es buena esta diversidad, que siempre ha habido en la comunidad gltb, sobre todo si lo que se propugna es un modo de vida diferente, alejado de los patrones desaforados de consumo y a la búsqueda de ese otro mundo posible que queremos que sea algo más que un eslogan.
Dicho esto, yo me manifiesto partidario de los actos de celebración de Orgullo tal como han venido transcurriendo en los últimos años, aun con sus defectos, por lo siguiente:
* Ha sido el despegue del barrio de Chueca -cuyas fiestas son las que han impulsado la marcha multitudinaria por el centro de la ciudad- el detonante para la transformación que se ha vivido en estos años. Su visibilidad para la sociedad española ha sido emblema de nuestra visibilidad.
* Es verdad que ese despegue, y también la marcha, está relacionado con el consumo y con la economía. Como todo. Si ha de ser así, aprovechémonos de ello. Y quien quiera apostar por otros valores, que lo haga y ojalá que tenga éxito, pero lo primordial era y es la promoción de nuestros derechos fundamentales y eso -no nos engañemos- ha sido posible, aquí y en todas partes, de esta manera. De todas formas, que participe el empresariado gltb en la marcha es algo lógico, porque es y sobre todo fue, en tiempos mucho peores que éste, muy importante para nuestro reconocimiento e interacción. ¿Que nos patrocina la cocacola y la MTV?: pues mira tú.
* No comparto las críticas a la Federación Estatal y su labor de estos años. Creo que han llevado a cabo una labor encomiable, junto con las organizaciones territoriales integradas, y que tanto Pedro Zerolo como Beatriz Gimeno -como el resto de activistas que han estado en primera fila- son personas valientes y eficaces, que cuentan con una formación solidaria y feminista fuera de toda duda. No es verdad que la causa lésbica se haya dejado de lado ni que se fomente el falocentrismo, y quien diga eso desconoce la realidad o la tergiversa.
* La faceta carnavalesca y exhibicionista de la marcha es atractiva para casi todos nosotros -y buena parte de su éxito-, refleja nuestra idiosincrasia y en cualquier caso no impide que la gente ajena a esa movida participe como en otra manifestación normal si es su gusto.
* ¿Madrid también en esto capital del averno por celebrar un Orgullo consumista y alienante, mientras que Cataluña y País Vasco -he leído- sí que conservan un espíritu auténtico? Uf. ¿Y si intentamos no reproducir las fobias de nuestros heteritos, que hasta ahora habíamos ido eludiendo, quizá por esa máxima terencimoixana del aprecio a través del conocimiento carnal?
* También escribían en la revista Diagonal, pionera en la crítica desde el izquierdismo a la Semana del Orgullo, que Lisboa y Atenas eran un modelo a seguir, por su sobriedad en la celebración. Claro que estos reporteros heteros, tan audaces y profundos cuando se trata de otro tipo de investigaciones, no reflexionaban sobre el motivo de las austeras marchas -unas doscientas personas, el año pasado- de estas dos, por otro lado, maravillosas ciudades: la sociedad portuguesa y la griega van veinte años por detrás de la española en cuanto a asunción de las identidades sexuales se refiere, y muchísimos gays siguen allí a rajatabla la consigna de Carola de noche -me desfogo- y Carola de día -me oculto-: no hay más que hablar con cualquier colega portugués o griego del ambiente -y desde luego con los italianos, que no obstante se han crecido mucho últimamente, precisamente con nuestro ejemplo- para saber lo que flipan con lo que ha ocurrido en España en estos años.

Y a todas y todos, oficiales y alternativos, simpatizantes y gayfriendly del mundo, pasadlo muy bien en esta larga semana de fiestas que se nos avecina.

PD: Tiburones en Korador ha sido añadida a la red de blogueros gay en español, cuyo enlace os facilitamos arriba, y a la que nos honra pertenecer. Y coming soon, la crónica de Bosé en Las Ventas, que no se me olvida.

1 comentario:

Oniria Intervalo Cultural dijo...

en cartelera!!! www.intervalooniria.com.ar
salud y saludos amigo desde córdoba, argentina.