domingo, 20 de enero de 2008

LUZ CASAL Y LA VOZ DE VENTANA EMPAÑADA


Ha comenzado ya la gira española de presentación del disco Vida tóxica, de Luz Casal. Y especifico española porque Luz es una de nuestras contadas artistas que no sólo gusta y triunfa en España y en Latinoamérica, sino en Europa, especialmente en la francófona, pero también en países como Grecia o Portugal.
Ya he oído varias veces el disco y me gusta mucho. La producción, de Paco Trinidad, es muy homogénea, no hay sensación de cambio brusco cuando Luz va alternando canciones pausadas con sus habituales temas rockeros, como en otras ocasiones, y carece de altibajos o rellenos, algo que sí se apreciaba en Sencilla alegría, su anterior CD -aunque quizá éste tenía más canciones redondas-. Del conjunto emana un aroma country que le va muy bien al estilo de Luz, y nos encontramos en la composición con algunos de sus colaboradores habituales como Pablo Guerrero o Carlos Goñi, también Luis Auserón, y claro está, ella misma, que firma la letra y la música de una de las canciones mejores del disco, que merece ser uno de los singles, Soy.

El tono general es muy optimista, algo habitual en ella, aunque es curioso que se la asocie más con las canciones tristes, en las que vuelca todo su sentimiento. Es muy interesante también la parte final, exponente de una faceta experimental que ella nunca ha desdeñado y que culmina con la canción atonal que cierra el disco, Sueños raros, con alusiones expresas a las visiones producidas por el tratamiento médico que ha conocido durante estos meses.

LA ESTRELLA DEL DISCO

Y ya desde la primera escucha brilla con luz propia una canción que yo creo está llamada a ser, más aún que Sé feliz, la reina de este disco: 18 años. Se trata de la adaptación de un tema que popularizara en los años 70 la francesa Dalida -muy conocida aquí en esa época, sobre todo por Gigi l´amoroso-, Il venait d´avoir dix huit ans.
(Luz normalmente adapta una canción francesa para sus discos, por el éxito que tiene allí: en Sencilla Alegría una de las mejores canciones, y con la que abría sus conciertos, era Octubre, de Francis Cabrel -el de La quiero a morir, que también cantara Manzanita-.)
No es por hacer de menos a Dalida, a quien queremos mucho, y que fue sin duda una pionera en eso que luego se ha llamado divas gay, pero la versión de Luz es muy superior a todos los niveles.

De hecho, en 18 años tenemos el privilegio de escuchar la modalidad de su voz que yo llamo de ventana empañada, con un timbre nasal cuyos delicados matices pueden remitirnos al momento supremo de estar a punto de llorar, o de acabar de haberlo hecho. Y es que la voz de esta artista es un tesoro que se ha ido enriqueciendo con el tiempo, cada vez canta mejor, porque las vivencias y sentimientos que ha ido acumulando son tangibles al oírla, su voz es el instrumento más sublime, que no precisa de ningún alarde para traspasarnos por entero, para adueñarse de todo aquello que canta y que ella nos devuelve mullido, confortable, querido y sentido, casi masticado, explicado con toda calma, como la marea del mar cuando se va retirando y se forman pequeños remolinos que van dejando su huella en la arena y todo lo impregna ya el olor a brea.
18 años es además una historia universal, vieja como la humanidad, que nos hace enseguida vibrar.

18 AÑOS
Los dieciocho años le dan una belleza de volcán, fuerza de un hombre
Cae el verano en la ciudad y al verle yo he contado mal mi calendario
Hoy mis cabellos ordené,
sobre mis labios dibujé sonrisas dulces
Y cuando estuvo frente a mí
algunas cosas sugerí, por seducirle

Los dieciocho años le dan una victoria sin rival, es ave de presa
Mientras se ríe del amor
piensa que es mucho mejor que no haya cuerdas
Me dijo: "Yo te quiero a ti", con la sonrisa de perfil y voz sublime
Bajo los cielos de París quién no merece ser feliz como lo fuimos




Los dieciocho años le dan una falsa seguridad de creerse un hombre
Cuando se volvió a vestir recomenzaron a latir mis soledades
No le he podido retener, se fueron pues detrás de él sus dieciocho
Me dijo: "No ha estado mal", con la frescura de un chaval de dieciocho

Y por costumbre maquillé mis labios para dibujar una sonrisa
Por una noche olvidé que tengo el doble de años que él.

2 comentarios:

Fernado Palaio dijo...

Belíssima a canção do teledisco!Belíssima a LUZ!É na verdade uma das vozes femeninas espanholas mais queridas aqui em Portugal,não só pelo público como por muitos colegas,também eles artistas,que a ouvem deliciados acredita!Também a"nossa"mais emblemática cantora,a que canta os poetas,sobreviveu a um cancro de mama para felicidade de um público que lhe é fiel há 50 anos!Que vivam TODOS e tardem em dizer-nos ATÉ JÁ os que nos dão CULTURA através das ARTES!FERNANDO PALAIO.

padam dijo...

buen resumen de lo que sería la voz de luz y todo su talento! soy una fan suya y como no, te invito a pasar por mi blog! aunque de ella solo le hemos dedicado un post...

saludos