SORPRENDEMOS A UN CIUDADANO DE BAELO CLAUDIA

El pasado verano recalé dos veces en Pompeya... y una en Herculano. Es difícil transmitir lo que se siente allí, ¿verdad? Íbamos escuchando, además, fragmentos de la carta de Plinio el Joven a Tácito explicando la inconmensurable tragedia que provocó el Vesubio, el volcán que continúa dormido -pero para nada muerto-, omnipresente en toda la comarca de Nápoles.

Lo que no me esperaba es que en la provincia de Cádiz fuera a toparme también con una villa romana -que anteriormente fue fenicia- que conoció varios siglos de esplendor hasta que llegara su decadencia en el II d.c. Parece que su ya imparable ruina tuvo que ver con un maremoto; el municipio -el emperador Claudio le otorgó este título administrativo-, que con anterioridad se había sobrepuesto a los daños ocasionados por un importante seísmo, en esta ocasión no levantó cabeza, ya que la catástrofe coincidió con una importante crisis económica...

Contemplar esta maravilla con la impresionante playa de Bolonia al fondo es algo que supera a cualquiera...

Y de la ciudad se conserva lo bastante como para que pueda volar, por un momento, la imaginación, que reconstruye una escena cualquiera de aquellos días, sospechando rostros y figuras con sus afanes, miedos, tragedias, desvelos... pero a falta de visualizar realmente a alguna de esas personas, en nuestro camino se cruzó un escarabajillo, heredero él sí, sin duda, de aquella Baelo Claudia de antaño... de una estirpe escarabajil legendaria que seguro se ha seguido reproduciendo en los mismos lugares, durante estos siglos, esperando contemplar en algún momento el esplendor de antaño...

TARIFA MEDITERRÁNEA Y TARIFA ATLÁNTICA

Qué belleza... después de esta gira por la provincia gaditana espero que me contrate la Junta de Andalucía, porque podría pasarme haciéndole propaganda el año entero...

Y DE REGALO...

Una foto en lo alto de ¡UBRIQUE! -No queríamos ir, que conste-

Mi madre y yo rememorando la portada de Una temporada en el infierno, de Fangoria (1999),
bajo la dirección artística de mi hermana, en un banco de El Puerto de Santa María

CHIPIONA, LO MÁS GRANDE

A nadie os sorprenderá saber, si es que no lo sabéis ya, que soy devoto de Rocío Jurado, cuya muerte todavía no he asumido, y a quien sigo imaginando a menudo: lo que diría en distintas situaciones, las canciones que seguiría cantando. Entonces, una vez en Cádiz, la visita estaba clara: Chipiona es para el fan de Rocío lo que Graceland-Memphis-Tennessee para el de Elvis. Chipiona es lo más grande. Y ella lo es todo allí, su recuerdo inmenso, comparable al Universo, como decía aquella canción erótica suya...

DOLORES / ROCÍO JURADO en el programa de TVE A su aire, grabado en CHIPIONA en 1975

(¡Qué buenísimo! Cómo hemos cambiado, jaja.. y qué tipillo se gastaba Rocío)

SU CASA

Su estrella, al lado del mar y del santuario de la Virgen de Regla

En el restaurante de su primo, en el rincón dedicado a la diva: más kitsch, imposible

En Chipiona hay muchos gatos en general, y el cementerio alberga a toda una comunidad, uno de los cuales -el de las dos primeras fotos- dicen que volvió andando y por su cuenta desde Sanlúcar de Barrameda a la tumba de Rocío, de donde no se despega...

CÁDIZ, CRISTINA LLISO, EL AVIÓN, LOS DADOS...

Conil, cual ciudad bíblica

El rescate, por doquier

Conil de la Frontera y su inmensa playa

Un chiringuito con solera, donde tomé una manzanilla -¡pero no la infusión!-

Chiclana desde el autobús... camino sembrao de flores encontré a mi chiclanera, que penaba mal de amores

Conocía muy poco de la provincia de Cádiz hasta ahora y eso para alguien que ama Andalucía -y España entera, de la que Cádiz es un must- es imperdonable. Así que en compañía de mi madre y hermana intento reparar estos días y en la medida de lo posible esa carencia. Verdaderamente la hermosura y hondura de esta tierra estremece -de placer, y de alegría-.

No dejes que se me escape la vida
me está doliendo el corazón
y es que no quiero cambiar no puedo
no quiero ser otro caramelo
Tengo un ruido en la cabeza
que no me deja escuchar
otra cosa que no seas tú

Y es que no quiero cambiar no puedo
no quiero ser otra frase más

Qué importa como caigan los dados
si al final
siempre están debajo del cubo
qué importa donde vaya el avión
si al final
siempre tendrá que aterrizar

Tengo un ruido en la cabeza
que no me deja escuchar
otra cosa que no seas tú

Y es que no quiero cambiar no puedo
no quiero ser otra frase más
No quiero cambiar

NO QUIERO / ESCLARECIDOS

Yo también tengo un ruido en la cabeza durante estos días, y es esa gran canción de Esclarecidos, perteneciente a su Dragón negro del 94. Ya sé que no tiene mucho que ver con lo de Cádiz, jaja, pero para mí sí, porque lo estoy viviendo al mismo tiempo. Además, ¿no estamos en Verano? Pues eso, todo mezcladito, como si fuera un tinto de ídem. Quisiera yo aplicarme la filosofía esclarecida en estos tiempos inciertos en los que, más que nunca, hemos de disfrutar del detalle...

Pero la buenanueva que os quería traer es que Cristina Lliso -cantante del grupo, que posteriormente formara el grupo Lliso con su hermano- ha vuelto a grabar -el CD se llama Si alguna vez- y a publicar después de mucho tiempo, y eso es un milagro tan sutil y extraordinario que hemos de dedicarle la atención que merece. Esta mujer es maravillosa, y única, la tenemos que seguir mimando...

MIRAR LA LUNA - CRISTINA LLISO

VUELVE CRISTINA LLISO, ¡NO LA DEJES PASAR SIN MÁS!
Arrópale el alma, que siente frío...

Y MUCHO MÁS CÁDIZ: ARCOS DE LA FRONTERA

VEJER DE LA FRONTERA

El hermoso pueblo blanco en cuyo espejo se miró Chef-Xaouen, la localidad marroquí

JEREZ ES MUCHO JEREZ

Debe ser en cierto modo verdad eso de qué importa donde vaya el avión si al final siempre tendrá que aterrizar... pero si ha de aterrizar en algún sitio, que sea en cualquier localidad de Cádiz...

ELIGE TU MERKEL FAVORITA

Parece que circula por doquier esta exhaustiva mirada a los últimos modelos que ha paseado en los actos públicos Angela Dorothea Merkel, la canciller alemana, que acaba de cumplir 58 años.

Es verdad que como dice Maruja Torres -de cuyo blog he bajado este retablo- la contemplación puede ser escalofriante, pero a mí siempre me ha caído bien ella, por distintos motivos: su personalidad sobria y austera; la seriedad que imprime a cada uno de sus gestos, y esa contención que la aleja de ciertos fanatismos visionarios. Claro que sus políticas, de un tiempo a esta parte, no me están convenciendo, pero recuerdo con agrado la capacidad que tuvo en su momento de gobernar en coalición con el partido socialdemócrata, como si fuera lo más normal del mundo hablar  y entenderse, en un momento en que eso -en España- entraría en el reino de la ciencia ficción más desmesurada.

A Xose y a mí nos hacen mucha gracia sus comparecencias.. él ha llegado a decir que cualquier día hará unas declaraciones en bata, incapaz ya de discernir el ámbito íntimo del público y oficial... ese imaginárnosla por la noche con su marido, intentando rebajar ya la tensión, con el camisón y una manzanilla, o con un pijama pantalón, consigue que por lo menos afrontemos la que nos está cayendo a todos con una gota de humor.

Por cierto, de los modelos ¿cuál es vuestro favorito? Yo creo que me quedo con el rosita de la cuarta fila, le favorece ese tono claro..

Y MÁS:

MR SAXOBEAT / ALEXANDRA STAN (Hi Def Radio Edit)

¡El eurodance rumano nos sigue alegrando la vida!

`THE MISFITS´, IMPRESIONANTE...

No había visto hasta ahora The misfits, la que fuera última película tanto de Marilyn Monroe como de Clark Gable -que moriría de infarto unos días después- y una de las últimas de Montgomery Clift, ya en la etapa post-accidente de su carrera. Mi amigo Jesús, muy fan de Marilyn, me comentó que se trataba de su mejor película, y Ripley me advirtió de que fuera preparado emocionalmente, por la enorme carga de la película.

Sucede a veces que cuando se visiona algo con demasiadas expectativas, estas no se satisfacen del todo. Pero no ha sido ese el caso en absoluto. De hecho, prácticamente desde el comienzo asistí a la proyección -en el Círculo de Bellas Artes- con un nudo en la garganta, absolutamente enfrascado e impactado por lo que estaba viendo, en lo que fue una especie de tour de force sensitivo y emocional -efectivamente-, que me dejó tocado. Ya no es solo el poder contemplar en la pantalla grande a esos mitos de la escena, que me pareció brillaban -en la debilidad de sus personajes- como nunca, sino todo el texto filosófico de Arthur Miller -que se separaba por entonces de Marilyn-, la belleza de las simbólicas imágenes, la tristeza de las generaciones que solo en apariencia quedaron indemnes tras la guerra.

Se cuenta que John Huston estaba tan alcoholizado durante el rodaje que a veces llegaba hasta dormirse; y que el día que apareció más sobrio fue precisamente el que estaba más borracho -en un esfuerzo titánico por que el equipo no se diera cuenta-; que Clark Gable, empeñado en no tener dobles, hizo un esfuerzo físico extraordinario que le llevó a perecer unos días después; que Marilyn estaba ida y absolutamente narcotizada -de hecho se la ingresó en un hospital durante dos semanas-; que Monty superaba sin embargo a todos en niveles de alcoholismo -y también que el día que murió unos años después televisaban The misfits, y le preguntaron si quería verla, a lo que respondió con un tajante Absolutely not-.

Quizá esa vulnerabilidad extrema de los actores -y director- que interpretan a personajes que se hallan efectivamente al límite sea lo que confiere a esta película que fue un fracaso comercial ese carácter tan especial  y delicado. Porque sientes que lo que estás viendo en pantalla es verdad de alguna manera... Clark Gable aquejado de vejez y sin aceptar a la Muerte que ya llamaba a la puerta; Marilyn grandiosa en su inconsolable desamparo, en la deriva que ya no tenía solución, más sola que nunca; y Monty consumido prematuramente, gastada su memorable belleza y en una espiral imparable de fracasos y adicciones. -También brillan los otros actores, como la entrañable Thelma Ritter y el sobrio Eli Walach, cuyos papeles son importantísimos-.

Hay escenas gloriosas en su delicadeza, que me producen congoja, por su belleza, por la forma en que subrayan lo insignificantes que somos, y lo que nos necesitamos unos a otros... la casa en mitad del campo, y el escalón que Marilyn instala subiendo y bajando una y otra vez, para sentir por fin que pertenece a un lugar en el mundo...; el baile en esa misma casa la primera noche, y cómo Marilyn, bellísima, se emborracha y tambalea y sale al exterior y se agarra a un árbol...; toda la larguísima escena de la caza de los potros, tan preñada de significaciones...

The misfits es una película única en su singularidad y tristeza, radiante sin embargo porque los seres que retrata son luciérnagas con el alma incandescente... nunca me alegraré lo bastante de haber ido el domingo a verla, en pantalla grande, al Círculo de Bellas Artes.

THE MISFITS (1961), una película de John Huston con Clark Gable, Marilyn Monroe, Montgomery Clift, Thelma Ritter y Eli Walach. Fue estrenada en España como Vidas rebeldes y en Hispanoamérica como Los inadaptados.

TRAILER ORIGINAL DE `THE MISFITS´